Ecologistas en Acción lleva ante el Fiscal un vertedero ilegal en Cañadas de San Pedro (Murcia)
Ecologistas en Acción ha presentado una denuncia ante la Fiscalía de Medio Ambiente y Urbanismo de la Comunidad Autónoma por la existencia de un enorme vertedero ilegal en el paraje de Cabezo de la Plata, en Cañadas de San Pedro (Murcia).
El basurero, explotado por una mercantil ubicada en San Pedro del Pinatar, carecía de autorización, y cesó su actividad en marzo de este año tras más de seis años de vertidos incontrolados de todo tipo de residuos. Un cierre que llegó forzado por las numerosas denuncias y quejas de organizaciones y vecinos del entorno del vertedero, según ha explicado la asociación en comunicado de prensa.
Sin embargo, en su denuncia, la organización ecologista explica que «el cese de la actividad no ha hecho desaparecer los riesgos ambientales y sanitarios derivados de la acumulación de miles de toneladas de residuos de todo tipo, incluido peligrosos, durante más de seis años». Y solicitan también que la Fiscalía investigue si la clausura definitiva del vertedero está siendo o no cumplida.
Pedro Luengo, coordinador regional de Ecologistas en Acción, explica «que se trata de uno de los casos más graves que hasta ahora hemos denunciado, por el volumen de residuos que se ha arrojado allí, por la superficie que ocupa y por la degradación ambiental que está ocasionando en su entorno, la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) Monte el Valle y Sierras de Altahona y Escalona».
La organización ecologista señala que «en el vertedero se registraba un intenso y continuo tráfico diario de camiones de gran tonelaje, que accedían a las instalaciones sin un control sobre lo que arrojaban».
El vertedero de Cañadas de San Pedro ocupa una superficie aproximada de unos 100.000 metros cuadrados, y los vertidos también afectan a la cercana rambla de Herradores. Para Ecologistas en Acción «la actividad de este vertedero ilegal durante más de seis años es una clara agresión al medio ambiente y a los recursos naturales, por lo que solicita que se abra por parte de la Fiscalía una investigación».
Y es que, concluye Luengo, «el reciente cese de esta actividad no hace desaparecer las responsabilidades en que pudiera haber incurrido la empresa propietaria de las instalaciones, ya que allí siguen esparcidas miles de toneladas de residuos».
Fuente_Ecoticias
