Adiós 2010 año de la Biodiversidad. Bienvenido 2011 año de los Bosques
En la Edad Media Robin Hood sobrevivió gracias al refugio del bosque de Sherwood y hoy la vida de 1.600 millones de personas depende directamente de los bosques del Planeta, cuya protección y conservación es, para la ONU, el principal objetivo medioambiental del año que comienza.
2011 ha sido declarado Año Internacional de los Bosques por la Asamblea General de las Naciones Unidas al reconocer que estos ecosistemas y su ordenación sostenible contribuyen «significativamente» al desarrollo, la erradicación de la pobreza y el logro de los objetivos de desarrollo del Milenio.
Esta edición es la segunda vez que los bosques son protagonistas de un Año Internacional: en 1985 el Consejo de la ONU para la Agricultura y la Alimentación (FAO) pidió a los Estados miembros que tomaran conciencia sobre la necesidad de protegerlos.
En un mundo ocupado por siete mil millones de personas los bosques, que representan más del 30 por ciento del territorio y contienen el 80 por ciento de la biodiversidad del planeta, pierden, anualmente, trece millones de hectáreas, una superficie equivalente a la cuarta parte de la península ibérica, según la FAO.
Las causas que señalan los expertos son todas provocadas por los seres humanos: sobreexplotación y tala ilegal, la conversión a tierras agrícolas y ganaderas, recolección insostenible de madera, gestión inadecuada de la tierra, creación de asentamientos humanos, explotaciones mineras y petrolíferas o la construcción de embalses y carreteras, entre otras.
Por ello, el lema elegido para la campaña es «Los bosques, para las personas», con el objetivo de resaltar el papel fundamental de los seres humanos en la protección de los bosques, hogar de 300 millones de personas en el mundo, especialmente pueblos indígenas que están también amenazados.
Además, los recursos forestales juegan también un papel clave en el cambio climático, ya que la deforestación es responsable del 20 por ciento de las emisiones mundiales de CO2 a la atmósfera.
En España, el «principal» problema de los bosques es la infrautilización de sus recursos, lo que impide, a juicio del Decano del Colegio de Ingenieros de Montes, Carlos del Álamo, realizar las inversiones «necesarias» para su recuperación.
«Sólo se usa una tercera parte de la producción forestal y en zonas muy concretas del territorio, lo que deja a los bosques sin fuerza económica», señala a Efeverde del Álamo.
Como consecuencia, explica este experto, se produce una desvinculación de la población local, falta de interés por una correcta gestión y conservación de los bosques y abandono de unos recursos que, en muchas ocasiones, constituyen el combustible de los incendios forestales.
El reto es tener una política forestal «activa y sostenible» que movilice la fuerza económica de los bosques, asegura del Álamo, y que devuelva a estos ecosistemas parte de los beneficios que generan -paisaje, biodiversidad, agua, uso público, absorción de CO2- y que la sociedad consume.
Esta declaración es una oportunidad para que todos los sectores sociales reflexionen sobre qué pueden hacer para potenciar la riqueza de los bosques, cuenta a Efeverde el patrón de la Fundación +árboles, Juan Valero.
Educación y formación son dos herramientas que Valero propone para dar solución a los problemas heredados, para que la sociedad actúe en defensa de los «verdaderos» valores de progreso y para trabajar en favor de una economía «real y sostenible».
Una intensa campaña de comunicación, concursos, exposiciones, una colección de sellos, un festival de cine y la Web www.un.org/forest son algunas de las acciones que Naciones Unidas pondrá en marcha a lo largo del próximo año.
Pasados doce meses será el momento de evaluar si todo ello ha servido para alcanzar los dos objetivos internacionales: una mayor concienciación de la opinión pública y el intercambio de información entre países sobre experiencias positivas aplicadas a la promoción de una ordenación forestal sostenible.
EFE
Autor:Isabel P. del Puerto