Cien murcianos y alicantinos visitan los supuestos vertederos ilegales de Abanilla

La ya famosa ´Ruta de la basura´ que recorre los supuestos vertederos ilegales que se acumulan en las fincas de alrededor del vertedero de Abanilla, propiedad del empresario oriolano Ángel Fenoll –implicado en el caso Brugal– sirvió para unir ayer a más de cien murcianos y alicantinos, que protestaron por la acumulación de basuras precisamente durante la jornada en la que se conmemoraba el Día del Medio Ambiente.

Vertivega, la plataforma ciudadana que ha abierto los ojos, entre otros, al eurodiputado socialista Andrés Perelló, se ha profesionalizado y contó ayer hasta con megafonía para hacerse escuchar en la caravana de cientos de metros de longitud, que contaba también con unidades móviles de televisiones nacionales.

El coordinador regional de IU-Verdes, el diputado José Antonio Pujante, dijo que están a la expectativa de lo que el Gobierno regional decida sobre la petición de ampliación del vertedero, algo que, a su parecer, debería rechazarse a todas luces por lo que se ha encontrado en el terreno, desde jeringuillas hasta plásticos, pasando por vidrios, pilas o cuchillas de afeitar. Vertivega le mostró también «una finca que está en pleno proceso de generación de gases, lixiviados que supuran de la tierra, el presunto compost vendido a los agricultores, que es basura triturada, y la ocupación ilegal de la Rambla Salada con ese mismo sustrato».

Entre los invitados también se encontraban el portavoz de Los Verdes de la Comunidad Valenciana, Joan Francesc Peris, y su presidente, Toni Roderic. Peris señaló que su partido celebraba el Día del Medio Ambiente en la pedanía de La Murada (Orihuela) porque «es la punta del iceberg de los despropósitos en materia de eliminación de residuos».

El problema, dijo, es que «los residuos son algo con lo que las empresas con escasa conciencia medioambiental deben hacer negocio». A su juicio, «ha habido una omisión absoluta de control, todo ha sido mirar para otro lado».

¿Qué hacer de ahora en adelante? «Hay que darle protagonismo a la indignación general, porque esto es auténtica valentía ciudadana». Peris reconoció que los vecinos tienen motivos para la frustración tras años de «desidia», pero indicó que «hay que denunciar política y judicialmente; las demás administraciones ya no pueden seguir negándolo».

E. G. BROTONS | La Verdad