El Proyecto de Ley de Residuos y Suelos contaminados pasa este miércoles al Congreso.
El proyecto de Ley de Residuos y Suelos contaminados, que entre otras cosas hará desaparecer las bolsas de plástico, se enfrenta hoy a su primer test en el Pleno del Congreso, donde se debatirán las enmiendas de totalidad presentadas por IU-ICV y el PP pidiendo la devolución del texto al Gobierno.
Madrid, 13 Abr. (Europa Press)
Con este proyecto se pretende trasponer al régimen normativo español la Directiva Marco de Residuos europea que, entre otros aspectos, establece un calendario de sustitución de bolsas comerciales de un solo uso, de forma que antes de 2013 se sustituyan el 60 por ciento de las mismas, para 2015 el 70 por ciento, para 2016 el 80 por ciento, para finalmente suprimirlas por otras biodegradables de forma definitiva para 2018.
Sin embargo, IU-ICV cree que el proyecto adolece de aspectos «cruciales» para avanzar hacia el objetivo de la «sociedad del reciclaje», además de que considera «necesario» vincular este proyecto con las estrategias de lucha contra el cambio climático y con la creación de una fiscalidad que promueva la prevención y la no generación de residuos.
«No puede aplazarse ni un día más el fin de la recogida en masa, hemos sufrido procesos sancionadores europeos por problemas de vertido en casi todo el territorio, hasta la paradoja de haber subvencionado el cierre de vertederos municipales ilegales», detalla en la exposición de motivos de la enmienda a la totalidad.
LOS RESIDUOS, A LA COLA EN ESPAÑA.
Desde la promulgación de la Ley de Residuos de 1998, precisa que las autoridades ambientales han dispuesto de un marco que permitía avanzar en el diseño y la implantación de nuevos modelos de gestión, si bien se ha observado «con desencanto» que este desarrollo no ha sido «prioritario» de forma generalizada en España, de forma que los residuos siguen estando en la cola de las prioridades.
«La propia renuncia del Gobierno de establecer objetivos en la recogida separada de biorresiduos en este proyecto de ley es una clara muestra de las prioridades en las agendas de las autoridades ambientales», añade. Igualmente, IU-ICV apunta que los objetivos establecidos en materia de reciclaje para el 2020 deben afianzarse en el proyecto, mediante la insistencia en la prevención, en la reutilización y en el reciclaje.
En este sentido, indica que los procedimientos de recogida eficiente deben contribuir a conseguir estos objetivos y, por ello, cree indispensable que, a parte de proceder en un futuro a la revisión de la Ley de envases y residuos de Envases de 1997, exista una «apuesta clara» de las autoridades ambientales por la implantación de Sistemas de Depósito, Devolución y Retorno.
Con respecto a las bolsas de plástico, cree «necesario» un calendario «más ambicioso», y que además reoriente los objetivos en la recogida selectiva de los biorresiduos, como base para una eficiente separación y aprovechamiento de todos los materiales y, de tratamientos eficientes previos al vertido y a la incineración.
ESTE TEXTO «VA MÁS ALLÁ» DE LA DIRECTIVA EUROPEA.
Desde el PP, se propone el rechazo y la devolución del texto presentado por el Ejecutivo porque «va más allá» de la directiva que debe transponer esta futura normativa, sin que se aporten mejoras ambientales, y contradiciendo en ocasiones lo establecido en las normas comunitarias en varios aspectos como el mercado interior o de servicios.
Es más, indica que el texto propuesto es «excesivamente intervencionista» para los propios sistemas instaurados desde hace más de una década y para el resto de administraciones, «invadiendo las competencias autonómicas», sin que se asegure la creación de un sistema de gestión de los residuos mejor que el que ya existe.
Así, considera que este proyecto de ley no proporciona una solución a las dificultades originadas en la gestión de los residuos, impone la constitución de una figura jurídica concreta, a la que habrán de ajustarse los actuales sistemas de gestión limitando, en su opinión, la libertad de organización de quienes se dedican a esta actividad.
El PP señala igualmente que quiere devolver el proyecto de ley al Gobierno porque introduce mayor complejidad en el régimen de autorización, y plantea un modelo con «cuantiosas dudas e interpretaciones», que puede originar inseguridad jurídica en su futura aplicación.
Eso sí, quiere que si finalmente se devuelve el texto al Gobierno, el nuevo proyecto de ley que se remita a la Cámara incorpore las aportaciones formuladas por los diferentes colectivos, entidades y organizaciones a lo largo de las comparecencias realizadas con ocasión de la tramitación del proyecto desde los grupos ecologistas, hasta los empresariales.
Precisamente, la pasada semana, el responsable de la campaña de contaminación de Greenpeace, Julio Barea, en nombre de Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción y CC.OO., pidió en el Congreso que la futura Ley de residuos y suelos contaminados prohíba definitivamente el empleo de las bolsas comerciales de un solo uso.
