Llega a Europa el primer papel hecho de piedra
Sin árboles, sin agua, sin cloro y fotodegradable, un nuevo papel que se hace a partir de piedra caliza, yeso o mármol, llega a Europa con el objetivo de convertirse en la alternativa medio ambiental al elaborado con fibra de celulosa tradicional.
Un 80 por ciento de polvo mineral y un 20 por ciento de una resina no tóxica, que actúa como aglutinante, son los ingredientes necesarios para producir «Terraskin», como se denomina este nuevo tipo de papel que ha sido presentado hoy en Madrid.
Esta composición permite producir un material muy resistente al agua, a la grasa y a las roturas, características que lo hacen apropiado para la fabricación de bolsas, etiquetas auto-adhesivas y envoltorio de jabones entre otras aplicaciones.
«Terraskin» se comercializa actualmente en EEUU y aterriza en Europa de la mano de la empresa española EmanaGreen cuyo director, Ignacio Schmidt, se ha mostrado convencido en su intervención de que éste no es un producto del futuro, «es para ser utilizado aquí y ahora».
No precisa madera, no gasta agua ni la contamina, no requiere blanqueado, utiliza un 50 por ciento menos de energía que el convencional y un 50 por ciento menos de emisiones de CO2 en su incineración, necesita un 30 por ciento menos de tinta y es degradable con una exposición al sol de entre tres a nueve meses.
La empresa matriz estadounidense, «Design and source», creadora del producto, tiene sus fuentes de mineral en Asia y dispone en la actualidad de una única fábrica, en Taiwan, desde donde la distribuidora española importará el producto para su venta europea.
Por el momento «Terraskin» sólo va a comercializarse a nivel industrial, ya que su precio no es aún competitivo para la venta directa a los ciudadanos, pero algunas empresas de productos del papel y complementos escolares ya han creado líneas específicas hechas con este material.
En este sentido, Schmidt ha asegurado que el objetivo de su empresa es llevar «Terraskin» a los hogares en un plazo de cinco años aproximadamente ya que, ha señalado, «si todo el papel del mundo fuera de este nuevo material se ahorraría la tala de más de 3.000 millones de árboles y el equivalente en CO2 a 55 millones de coches.
Fuente_EFE Verde